La presencia de las redes sociales en nuestra vida cotidiana es innegable. Según un estudio realizado por We Are Social y Hootsuite, en 2020 Instagram fue la segunda red social más utilizada por los portugueses, justo después de Facebook. En ambas plataformas, la imagen ocupa un lugar destacado, ya sea en forma de foto o de vídeo. ¿Cuántas veces nos hemos detenido en una bonita foto en el perfil de alguien? ¿O cuántas veces nos hemos derretido con la pose perfecta en un paisaje paradisíaco? Aunque no podemos ayudarte con el paisaje, estamos aquí para hacerte la vida más fácil a la hora de posar.
Con la ayuda de nuestros modelos, te daremos algunos consejos para que tu perfil en las redes sociales sea más diverso e interesante. Hoy en día, no necesitas ninguna excusa para querer hacer una buena foto para tu perfil. De pie o sentado, con el look completo o sólo un detalle, las poses marcan la diferencia en una foto y no siempre es tan fácil pensar en ellas. Algunos pueden ser incluso incómodos de hacer, pero el resultado final valdrá la pena. El truco principal es practicar mucho, ser creativo y divertirse. Se acabaron los días de hacer mil y una fotos y no gustar ninguna.
Una foto suele ser más interesante cuando cuenta una historia. Un movimiento o una acción ayuda y hace que la imagen sea más espontánea, natural y dinámica. A menudo, el detalle que marca la diferencia es estirar el cuerpo. Ponerse de puntillas, una pierna delante de la otra o disparar desde abajo hacia arriba son algunas de las opciones disponibles para conseguir este efecto. Puede parecer una obviedad, pero poniéndote de puntillas no sólo parecerás más alta, sino que también te verás más tensa y elegante. Además, conseguirás una toma fresca y diferente, perfecta para lucir un conjunto.
Otra opción es dar una pequeña patada en el aire. Esta es una postura más dinámica en otoño, por ejemplo, en la que se pueden patear las hojas que están en el suelo, creando movimiento, pero no debe excluirse en ningún momento. Otra cosa a la que debes prestar atención es a la posición de tus pies. Al estirar el pie, apuntando con los dedos hacia delante, se alargará la línea de la pierna, haciéndola parecer más larga y bonita. Esto es lo que suelen hacer los bailarines. Los pies doblados o torcidos dan un aspecto torpe al cuerpo. En cuanto a los brazos, lo ideal es que estén ligeramente separados del resto del cuerpo. Al apretarlos contra el torso, parecen más anchos de lo que realmente son.
Como hemos dicho antes, fotografiar de abajo a arriba (a contrapicado) te hará parecer más alto, mientras que fotografiar de arriba a abajo (picado) te hará parecer más bajo. Sin embargo, para evitar que se produzca una papada, debes disparar por encima del nivel de los ojos. Así que, ¿cómo puedes conciliar ambas cosas y parecer más alto a la vez que evitas la papada? Fácil: cuando te hagas fotos de cuerpo entero en las que quieras parecer una persona más alta, sólo tienes que estirar el cuello e inclinar ligeramente el mentón hacia arriba. Por otro lado, cuando quieras fotografiar un primer plano, sólo de cintura para arriba o sólo la cara, apuesta por un primer plano. Recuerda que no todos los ángulos que funcionan para las tomas de cuerpo entero sirven para los primeros planos.
El movimiento es lo que debes elegir cuando no sabes qué hacer. Puedes caminar, correr, bailar, saltar, girar, lanzar algo al aire o jugar con la tela de tu ropa. Lo que quieras. La sensación de movimiento en la imagen es siempre atractiva. Puede ser tan sencillo como caminar hacia delante, en diagonal o incluso en dirección contraria a la cámara. A menudo la foto no capta una pose, sino una acción en el momento perfecto. Además de ser más divertida, una imagen en movimiento transmite más energía y llama más la atención. Prueba a caminar en dirección contraria a la cámara y a mirar por encima del hombro. Esta postura realzará tu figura y resaltará tu atuendo y tu entorno. Básicamente, es como si estuvieras caminando por la calle y alguien te llamara.
Otra buena opción es jugar con lo que llevas puesto. Normalmente lo utilizan más las mujeres que llevan faldas o vestidos vaporosos, pero este consejo también se puede utilizar con chaquetas, bufandas o bolsos. De hecho, funciona incluso con el pelo. Sin embargo, hay una cosa muy importante que no puedes olvidar: debes tener siempre presente la cara que pones al caminar, girar, saltar, bailar o correr. No querrás captar el momento perfecto y que te salga una cara que no te guste -según nuestras fuentes, es posible que te rías demasiado-.
Los consejos aún no han terminado, pero por ahora hemos acabado aquí. Con estos consejos que hemos mencionado hoy, estás listo para empezar a probar y mejorar tus fotos. Si todavía no te sientes confortable delante de la cámara, no te preocupes. Sólo tienes que seguir practicando. Prueba diferentes ángulos, diferentes poses y diferentes expresiones. Con el tiempo descubrirás lo que te funciona y arrasarás con tus producciones fotográficas.
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